¿Por qué te gusta San Sebastián?, pregunto a Sabin mientras caminamos por el Paseo de la Concha. “Porque siempre hay música y por la playa”. Me ha salido muy festivalera la criatura. Y no es para menos. Desde Navidad, en Donostia se suceden fiestas y más fiestas musicales y ruidosas, la más conocida, el día de San Sebastián y sus tambores.
Desde nuestro regreso a mi ciudad natal, hace ya más de un año, he descubierto otras razones por las que me gusta San Sebastián, desde la perspectiva que te da la responsabilidad de la maternidad. Calles peatonales, parques, paseos, la montaña, la playa… todo a mano, sin salir de la ciudad.
El primer día tras la mudanza Sabin salió a la calle con su bici y se puso a gritar como un energúmeno corriendo calle arriba calle abajo, ahí me di cuenta de la sensación de libertad que ha ganado, hemos ganado. Salir a la calle con la bici sin la constante tensión de ten cuidado con los coches, no te alejes demasiado, hay un cruce, una salida de garaje… (No te he contado la ciudad en la que vivíamos antes – y que adoro – Madrid).
Este fin de semana ha hecho un tiempo espectacular. Salimos al parque de San Telmo con la bici, nos dimos al terracing en la Plaza de la Constitución, volvimos al parque, esta vez al de Alderdi Eder, tomamos el aperitivo en La Mejillonera y paseamos e hicimos dibujos en la arena – algo que les encanta a mis dos fieras-, en la playa de La Concha. ¿Cuántos semáforos cruzamos? Uno.
San Sebastián es una ciudad amable, pausada, muy manejable. Cuando Mavi me propuso hablar de Donostia para Mammaproof, le dije que no creo que haya muchos sitios Mammaproof. Estaba equivocada. Pero también es verdad que si no los hay, habrá que hacer que los haya, ¿verdad?
Si quieres conocer más planes por Donostia puedes leerlos aquí.
También te puede interesar: Vacaciones en Zarautz con niños.
¡Comenta!
Ver Política de Moderación de comentariosPingback: Escapadas con niños por España - Mammaproof Madrid