Rose Bonbon es un nuevo concepto de tienda de segunda mano en el que podréis encontrar ropa de calidad y en perfecto estado, complementos, calzado, juguetes, cuentos e incluso artículos de puericultura cuidadosamente seleccionados por Charlotte.
Ubicado muy cerca de la Sagrada Familia, Rose Bonbon acaba de abrir sus puertas y viene a traernos una solución económica, sostenible y práctica para comprar muchas de las cosas que nuestros retoños van a necesitar sus primeros años de vida.
Detrás de este proyecto está Charlotte, una mamá francesa afincada en Barcelona y que tras años trabajando en el sector de la moda y el e-commerce ha abierto esta preciosa boutique en la que la segunda vida es la protagonista “Me encanta buscar piezas únicas, me apasiona lo vintage y, de hecho, toda la decoración y mobiliario de la tienda es de segunda mano.”
Y es que Charlotte ha dado en el clavo con una propuesta de espacio desenfadada y colorista que invita a darse una vuelta y a rebuscar entre sus perchas. Rose Bonbon ofrece una nueva forma de presentar y dar valor a artículos de segunda mano.
El concepto de la tienda, en realidad no es nuevo, en Francia hace más de 25 años que existen tiendas de segunda mano de ropa y complementos, juguetes, libros… Pero Charlotte se dio cuenta que en Barcelona no existían otras tiendas que se dedicaran íntegramente a la venta de segunda mano de productos para peques y se lanzó a la aventura.
El punto de partida está claro, las que tenemos niños sabemos bien la cantidad de ropa que necesitamos para nuestros retoños y lo pronto que se les queda pequeña, muchas de las prendas que nuestros hijos e hijas necesitan tienen una vida útil muy corta, mucha de la ropa que usamos para el día a día termina en perfecto estado cuando la retiramos. Por no hablar de prendas más específicas como bañadores, botas de agua, monos de nieve, ropa de vestir… que apenas se pondrán unas pocas veces antes de que se queden pequeñas…
Ropa y complementos de segunda mano para mirar, tocar y llevarte al momento
En los últimos años hemos visto un auge de aplicaciones tipo Wallapop o Vinted que facilitan la venta de segunda mano entre particulares pero claro tiene handicaps, en el caso de la ropa no puedes tocar ni ver bien cómo son los tejidos, no la puedes probar ni revisar si tiene imperfecciones, además de toda la gestión de envíos de paquetes para aquí y para allá. En Rose Bonbon puedes pasear por la tienda, ver la selección que Charlotte hace de cada temporada, tocar, probar y llevarte varias prendas a la vez sin tener que gestionar conversaciones ni negociaciones con cada uno de los dueños de las prendas.
“Llevaba muchos años en el sector del e-commerce y me apetecía tener un local físico, poder conocer a la gente y poder ofrecer una experiencia de compra sostenible que dé más valor a los artículos de segunda mano.” Cuenta Charlotte.
¿Cómo funciona el depósito-venta?
Charlotte recoge la ropa en depósito de familias que ya no van a darle más uso, revisa una a una las prendas para seleccionar sólo las que están en perfecto estado, son de temporada y de marcas de buena calidad: Petit Bateau, Boboli, Gocco, Jacadi entre otras muchas. Las prendas, juguetes y artículos se etiquetan de nuevo con un precio que Charlotte fija y si se venden, la depositaria del artículo se lleva un % de la venta. La ropa que no se vende o que no pasa el filtro de Charlotte se devuelve a la depositaria o se dona a entidades del barrio.
Además, la trastienda de Rose Bonbon es un espacio familiar en el que Charlotte ha dispuesto material para jugar, mesas y sillas y que se ofrece para organizar actividades y reuniones.
Ya lo véis, si estáis buscando una forma más sostenible de comprar aquello que vuestra hija o hijo necesita, daros una vuelta por Rose Bonbon y saludad a Charlotte de nuestra parte 🙂