Si una ventaja tiene vivir en Vilafranca del Penedès, es que a penas a 1km del centro de la ciudad ya empiezan las viñas, y puedes llegar a ellas a pie.
Hay muchas y variadas rutas para todos los niveles. Nosotros hemos caminado el primer tramo de algunas de las que parten de la ciudad, en diferentes épocas del año y con niños de diferentes edades (lo vereis en las fotos), y siempre ha sido una experiencia muy grata estar en contacto con la naturaleza.
Hacia el sur, puedes llegar andando al municipio vecino, Olerdòla, y no puedo dejar de volver a recomendar la zona de la muntanyeta para organizar un picnic con amigos.
Desde la oficina de turismo del Penedès, parte una ruta sencilla, que han habilitado con puntos informativos e hitos en el camino relacionadas con el cultivo de la viña, el camí del vi. Pasa por unos de los parques urbanos más grandes de Vilafranca y desde allí se puede hacer bien con bicicleta. Lleva hasta la torre de les Aigües, ya en el límite con Pacs del Penedès. A los niños les motiva mucho ir buscando el siguiente hito.
Aunque la ruta dominguera por excelencia es la muntanya de Sant Pau. Aqui hay un poco más de desnivel, pero suficientemente asequible para niños urbanitas (no apto para cochecitos). Al final, un buen mirador a la ciudad. Periódicamente, se organizan actividades en familia el fin de semana, cómo “una montaña de fosiles” o “vamos a recolectar olivas”. Podeis consultar la agenda en la web de mediambient de Vilafranca
Durante el ascenso, encontrareis información sobre las diferentes variedades de uva y cómo reconocerlas.
Todas estas rutas tienen su inicio a menos de 1,5 km de la estación de tren. No necesitáis coche para disfrutarlas. Recordad, eso sí, que el sábado es dia de mercado en Vilafranca. Es un mercado que se celebra desde el medievo y aún conserva alguna parada de aves vivas, algunas de plantel para vuestro huerto urbano y muchas de fruta y verdura de pequeños productores locales. Podeis aprovechar para llenar la despensa! Y que los domingos los caminos se llenan de deportistas y famílias. No espereis tener la montaña para vosotros solos.
El Penedès en general, es una buena opción para senderismo ligero. Muchos municipios cuentan con áreas para autocaravanas habilitadas, desde las que también podéis organizar algún itinerario a pie.
Otro espacio natural muy recomendable es els Pelags de Viloví. Lagos que se formaron tras extraer la cal de las montañas y que hoy son un paraje natural donde conviven muchas especies. Hay miradores para observar las aves y una gran àrea de aparcamiento desde la que descubrir la zona. También hay oportunidades de practicar el geocatching. No siempre son fáciles de encontrar, pero no dejéis de intentarlo.
Si venís en coche, aprovechar la visita para reservar una visita en alguna bodega y degustad (con moderación) el vino y cava de la zona. Muchas organizan también actividades familiares y otras cuentan con restaurantes en los que recuperar fuerzas.