CelebracionesSalas para cumpleaños en Barcelona: Festial

Los padres y madres de niños de otoño/invierno tenemos mucha envidia de las fiestas de verano a las que vamos. En parques, jardines, en la playa… Hay muchas posibilidades, ¿verdad? Pero como madre de dos criaturas de Noviembre tengo que buscar alternativas de cumpleaños en lugares cerrados porque, aunque recuerdo haber dado a luz en manga corta, Noviembre es un mes del que no te puedes fiar. Es por eso que siempre hemos optado por celebrar los cumpleaños de nuestros pequeños a cubierto.

La “mayor” ha cumplido tres y cuando se junta con sus amigos, mejor que todo el mundo se aparte. Buscando un ambiente ideal para esta tropa, encontramos la sala de fiestas Festial. Una sala especializada en organizar fiestas donde te dan todas las facilidades para hacerla a tu medida. Mireia nos fue resolviendo todas las dudas que nos iban surgiendo días antes, y nos ayudó a escoger el día más idóneo. Tras pensar a conciencia cuál sería la mejor fecha para celebrarla, finalmente nos decidimos por el mismo día de su cumpleaños.

Aunque era viernes, y con el riesgo de que los minis estuvieran cansados de la escuela, debo decir que… ¡no podíamos haber escogido mejor! Al ver la piscina de bolas y las camas elásticas parecía que los niños se acabaran de levantar. ¡No estuvieron quietos ni un segundo!

Incluso hubo algunos desertores del taller de pintar camisetas que les habíamos preparado… Demasiadas emociones para una tarde de juegos. Aún así, los que se animaron a hacerlas ¡fueron muy pero que muy creativos! No os puedo enseñar el resultado porque se las llevaron todavía húmedas y faltaba retirar la cinta adhesiva, pero ellos disfrutaron de todo el proceso… mientras nosotros sufríamos esperando que no se ensuciaran en exceso.

Para los padres fue también una buena tarde. Mientras las criaturas jugaban, nosotros tuvimos una merienda distendida y algunos se quedaron pilladísimos en el futbolín. La verdad es que las dimensiones del local nos permitieron compaginar muy bien ocio infantil y ocio adulto.

En cuanto a tema organizativo, no tuve demasiado tiempo de preparar la merienda pero, entre cosas que traje de casa y una parada técnica en el súper y la panadería, ya lo tuve todo listo. 

Desde Festial también ofrecen servicio de comida y decoración, pero nos hacía gracia montarlo nosotros mismos (aunque al final el tiempo se nos tirase encima y acabáramos haciéndolo a toda prisa). Los padres tuvimos nuestro particular momento de “diversión” hinchando globos (en la sala tienen un hinchador eléctrico que es una pasada) y colgando banderitas. La idea era que todo fuese verde y rosa, tal y como nos pidió la anfitriona. Al acabar, y cuando prácticamente no quedaba nadie, la anfitriona lloriqueaba que no quería irse… Y yo, mientras la consolaba, me iba contenta de haberle dado una buena tarde de cumpleaños.