En mi época de pre-madre iba mucho al cine. Me encantaba sentarme en la butaca (programa en mano) y convertirme en observadora de lujo de otras vidas, de otros mundos que iban mostrándose a través de la gran pantalla. Reír, empatizar, emocionarse…el cine es pura magia y la experiencia de verlo en pantalla grande es un auténtico tesoro para un cinéfilo.
En ese tiempo remoto frecuentaba mucho la Filmoteca, en su antigua ubicación en Major de Sarrià. Los niños y la vida han hecho que esas tardes de cine hayan ido desapareciendo (lagrimita…). En los últimos 4 años puedo afirmar que únicamente hemos ido al cine a ver cortos de animación y poco más, aunque uno de los propósitos para este curso es cambiar esta situación. Aprovechar que Eddy es más mayor para compartir el amor por el séptimo arte con él.
El domingo pasado dejamos al padre y a pequeño Jacques en casa y nos fuimos “de cita a dos” a la Filmoteca. El paseo en bici hasta el Raval era parte de la aventura, comentando cada rincón, fijándonos en las fachadas y en las gentes variopintas que nos ibamos cruzando.
La sede del Raval de la Filmoteca de Catalunya es un equipamiento moderno y accesible. Cuenta con dos salas de cine, una biblioteca, una sala de exposiciones, una cafetería, una librería y acoge también las oficinas de este centro cultural.
Uno de los objetivos de la Filmoteca de Catalunya es el de acercar el cine de calidad en pantalla grande a los niños y niñas.
Es por ello que disponen de una programación infantil repleta de títulos de lo más interesantes que se dirigen a los pequeñxs y a sus familias. Estas sesiones tienen lugar los sábados y domingos a las 17 horas a un precio de lo más democrático (2€, más info aquí). También tienen una programación especial para escuelas a partir de P4.
Como Eddy es un ecologista de pro (apasionado de los bosques y de los animales) nos decantamos por el film documental Les Saisons. Una película maravillosa, emotiva y de una belleza espectacular que nos hace tomar conciencia de cómo la mano del hombre ha modificado la vida en los bosques eruropeos. Un tema que todavía cobra mayor relieve después de los incendios horribles de los últimos días.
La peli la proyectaban en la Chomón, una sala cómoda, grande y con una calidad de sonido espectacular. A la entrada de la sala nos esperaban un montón de alzadores de colores para que todos los niñxs estuvieran a la altura correcta para no perderse nada del film.
Un montón de familias con minis de todas las edades disfrutaron de la proyección, ¡incluso había algunos bebés que se portaron súper bien!
Al acabar el film nos fuimos a cotillear en la tienda que tiene una estupenda selección de libros y DVD’s para los mini-cinéfilos.
Nos quedamos con las ganas de tomar algo en la cafetería pero ya se nos había hecho un poco tarde. ¡Seguro que volveremos! Es un auténtico planazo.
