El otoño es una época ideal para una escapada a la Cerdanya y más si en el cole os ponen deberes: recoger piñas, hojas de árboles de diferentes colores y tamaños y bellotas. Por eso os proponemos 5 excursiones fáciles para hacer a pie con niños (con carrito e incluso andando).
Mirador Cap del Ras
Esta excursión es muy fácil, ideal para familias con niños que se cansen andando (2-3 añitos) o para hacer con cochecito (sin que sea un cochecito de montaña). El acceso a este mirador es un itinerario adaptado para personas con movilidad reducida y hay un caminito asfaltado hasta el final del mirador. Para llegar al inicio del camino, tendréis que subir, desde el pueblo de Riu de Cerdanya en coche, una pista forestal de 10 quilómetros hasta el parking del mirador (os recomendamos un coche todo terreno, aunque el camino está en buen estado). El camino pavimentado hasta el mirador se adentra hacia el bosque y son unos 700 metros muy fáciles en llano. Hay vistas de todo el Cadí y las montañas del parque Nacional d’Aigüestortes, el Puigpedrós y los pueblos de Bellver, Prullans, Lles o Meranges.
Paseo circular en Llívia y el parque de Sant Guillem
Una excursión circular por los alrededores del pueblo de Llívia. Se sale en dirección Gorguja por el camino del Pla de les Forques y la vuelta es por el camino Concellabre. Son un total de 3 kilómetros en llano entre campos, parte del camino en asfalto y parte sin asfaltar. Por tanto, os recomendamos mochila portabebés o cochecito con ruedas grandes de montaña. Las vistas valen mucho la pena, se ve todo el valle de la Cerdanya.
De vuelta, haced una parada al parque de Sant Guillem de Llívia, uno de los mejores parques públicos que hay en la zona. Hay juegos infantiles para bebés, para niños más grandes con tirolina, pista de básquet, campos de fútbol (sí, hay 3 campos de fútbol), barbacoas, piscina de verano i acceso al río Segre (os podréis bañar en verano). Es un parque muy amplio para llevar los niños (y también los perros!) a pasear. Y un lugar fantástico, de árboles de hojas amarillas, naranjas y rojas en otoño.
Ermita de Dorres (ermita de Santa Maria de Bell-lloc)
Hay una colina en la Cerdanya con una ermita muy pequeña: es la ermita de Dorres, que siempre está allí vigilando. Para subir, tendréis que ir hasta el pueblo de Dorres, conocido por tener unas termas romanas. La excursión a pie se puede hacer desde el pueblo o se puede acceder en coche por pista forestal y hacer el último tramo (subida, eso sí) a pie. Es una excursión con una panorámica fantástica si hace buen tiempo, con vistas 360 grados de la comarca. Recomendamos mochila portabebé.
La cascada de Ur
En el pueblo de la Cerdanya francesa de Ur hay un caminito muy fácil que se puede hacer con media horita desde el centro del municipio hasta una pequeña cascada. Es una excursión muy fácil que pueden hacer perfectamente niños de 2-3 años, camino llano de unos 400 metros ida y 400 metros vuelta. Tenéis que aparcar el coche en el parking detrás de la iglesia de Ur y coger el caminito que continúa en la calle Brangoly. A pocos metros encontraréis un desvío con un cartel amarillo que indica el camino a la ‘cascade’. Atravesaréis prados con vacas y caballos, hasta una pequeña garganta en el río y la cascada. Camino rural, os recomendamos mochila portabebés o cochecito de montaña.
El castillo de Llívia
Otra buena vista panorámica de la Cerdanya es desde el castillo de Llívia. Hay dos caminos para subir, uno con más pendiente que el otro. Si optáis por el más suave, tendréis que ir por el camino de detrás de la iglesia de Llívia que va a Estavar y veréis un camino ancho para coches que sube la colina del castillo. Este camino va bordeando la montaña en una subida ligera, pero es el camino más largo. Este camino se puede hacer con cochecito de montaña (o ruedas grandes).
Para ir más rápido, detrás de la iglesia de Llívia nace un pequeño sendero que sube directo al castillo. Este sendero es estrecho, así que si optáis por esta vía, tendréis que ir con mochila portabebés. Nuestra recomendación es que subáis por el camino largo y hagáis la bajada por el sendero estrecho y corto. Arriba en el castillo hay algunos restos de la antigua fortificación y unas vistas espectaculares.