Una librería, como dice Esther, la dueña de Kirikú, es un espacio vivo, y Kirikú es la prueba perfecta de sus palabras. Se trata de una librería mágica situada en el barrio de Retiro.
De su techo cuelgan margaritas, tienen una mini biblioteca a la entrada para que los peques puedan jugar y tocar los libros aunque no quieran comprarlos, y allí los sábados pasan cosas, cosas muy variadas y divertidas alrededor de los cuentos y del espacio donde viven.
Se trata de transmitir la riqueza del mundo del libro, y para ello en Kirikú se valen de uno o más cuentos para hablar de poesía, de teatro, de matemáticas, para hacer experimentos y manualidades, para que los niños se impliquen y formen parte del maravilloso mundo de la literatura.
En Kirikú no faltan ideas ni novedades. Allí vive la “Compañía de Teatro Efímera y sin Ensayos”, donde montan sobre la marcha una pequeña representación del cuento que acaban de contar; se practica el kintsugi, una ancestral técnica japonesa de restauración de objetos estropeados, y un pequeño teatro lambe lambe casero nos cuenta mediante una obra el mágico nacimiento de la librería.
Kirikú y la Bruja tiene una relación muy fraternal con la Biblioteca Pública del barrio de Retiro, y juntas ambas proponen proyectos e iniciativas muy especiales, como un premio conjunto al mejor álbum ilustrado o escaparates dobles que contestan preguntas utilizando los libros como método de expresión.
En resumen, Kirikú es un lugar muy especial donde tus hijos aprenderán a amar los libros y los lugares donde estos habitan, un regalo que les acompañará toda la vida.
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Estoy buscando el libro de kiriku y la bruja lo teneis