Bodypainting comestible
Este es un taller para comérselo, porque para empezar fabricaremos pinturas comestibles en varios formatos (pintura de dedos,cubitos de hielo…) con ingredientes que todos tenemos en casa.
Después llega la hora del pringue ya que pintaremos y nos pintaremos con ellas como si nuestros cuerpos fueran lienzos. Notar la diferencia de temperatura, la sensación de la pintura en la piel, sentir las distintas texturas, son experiencias muy satisfactorias con las que los niños se divertirán y se refrescaran mientras aprenden. Un taller de disfrute a tope para los más chiquitines. ¡Venid preparados para pringaros!
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