Escapadas3 alojamientos ideales para niños en Asturias

A finales de junio, en plena ola de calor, nos marchamos de vacaciones a Asturias, donde pudimos comprobar que “Paraiso natural” es algo más que un buen eslogan, es verdaramente el paraíso del frescor y la calma. Hoy vengo a contaros los alojamientos en los que estuvimos: económicos y sin lujos, pero ideales para niños y en pleno contacto con la naturaleza, tal y como queríamos, porque el verdadero lujo nos parece que las que las niñas conecten con la naturaleza.

Casinas rurales de Asturias

El primero de ellos se llama Casinas rurales de Asturias y está en San Martín de Villanueva, un pueblo diminuto cercano a Luarca. Nos conquistó su piscina climatizada, ideal para usar aunque haga fresco o llueva (ideal para el verano Asturiano), sus vistas de la montaña, la tranquilidad del entorno y la amabilidad de su dueña, Maruja, siempre dispuesta a hacernos los días más agradables. Coincidimos con una familia encantadora los primeros días y con amigos después, así que pudimos tener largas conversaciones mientras las niñas jugaban con sus amigos.

La Quintana de la Foncalada

Después fuimos a la zona centro, a través de una amiga, descubrimos La Quintana de la Foncalada, una pequeña granja-alojamiento rural en Argüero, donde te puedes alojar y participar en las actividades con los animales. Había varías familias y las niñas se lo pasaron fenomenal con sus nuevas amigas, los columpios –la casa del árbol causaba sensación–, la fuente, las visitas a los animales… Los dueños están intentando recuperar especies autóctonas como las gallinas pitas, las ovejas xaldas, los asturcones, las cabras bermejas (las cabbias les llamaba Emma jiji) y ofrecen actividades como cardado de lana, cerámica, familiarización con Asturcones y visitas a la granja. Podéis ver más en un programa que grabaron en la TPA.

El Balcón del Marqués

Finalmente decidimos pasar unos días en Picos de Europa para descansar antes de volvernos a Madrid y escogimos los apartamentos El Balcón del Marqués unos apartamentos situados en un pueblito cerca de Cangas de Onís. Toda la tranquilidad del mundo, unas vistas de los Picos de Europa inmejorables, un entorno delicioso, y columpios y camas elásticas para que jugaran los niños. También había otras familias con peques, así que disfrutaron muchísimo de la última parte de las vacaciones.

Ya en Madrid, y con esta ola de calor eterna, dan ganas de volver a Asturías y quedarse a vivir. ¡Que paisajes tan bellos y que gente tan bonita!