El fin de semana pasado vivimos nuestra primera experiencia de esquí en familia.
Un amigo nos recomendó la estación de Font Romeu por sus pistas ideales para principiantes y un ambiente de lo más familiar.
Además, y porque no sólo venimos a esquiar, interesará saber que la estación se encuentra en una bella comuna francesa, en pleno corazón del parque nacional de los Pirineos Catalanes.
Nosotros nos alojamos en el chalet de un amigo, pero pude observar una discreta infraestructura hotelera, bien integrada en el paisaje: pequeños hoteles, albergues, chalets de alquiler y hasta campings preparados para el invierno con sus cabañas de madera en medio de la naturaleza.
imágenes de la web de Huttopia
Aunque no hemos probado este camping en concreto, os recomendamos vivamente investigar la oferta de la cadena Huttopia, este verano durante nuestras vacaciones en Francia estuvimos en varios de los campings de su submarca índigo y ¡nos encantaron! sus instalaciones son modernas, respetuosas con el medioambiente y muy preparadas para las familias inquietas.
Pero lo que sin duda quería recomendar a los papás con niños de más de 3 años es el Club Piou, Piou.
A pie de pistas, en un chalet de madera y rodeado de suaves laderas para deslizarse sin peligro alguno, se encuentra esta ludoteca que propone un servicio de guardería (para que los papis vayan a esquiar) y cursos de esquí colectivos para iniciar a los niños a las sensaciones de la nieve…y la velocidad!
Leo, por supuesto la probó para todos vosotros y ¡estaba encantado! Durante dos horas y bajo la atenta vigilancia de los monitores, el grupo de niños se divierte, aprendiendo a esquiar en un entorno seguro donde podrán hacer uso de un pequeño teleski y dos cintas transportadoras. No os podéis imaginar lo bien que se lo pasó…
Mientras que yo y Piero (aún demasiado peque para el curso) desayunábamos en “la cantine” y nos tirábamos una y otra vez en la pista de trineos.
Esta vez me quedé de canguro para que mis amigos (los papás de Piero) pudiesen esquiar con mi pareja. No me arrepentí, las instalaciones a pie de pista ¡dan mucho juego a las madres intrépidas!
Y ahora os cuento lo que sin duda es el broche final de esta jornada en la nieve. Tienes dos opciones:
1. Saborear una deliciosa”tartiflette” en uno de los típicos restaurantes de Font Romeau. Nos recomedaron encarecidamente el restaurante La Chaumiere porque además de comer divinamente no se asustan cuando te ven entrar con niños.
2. Ponerte un bañador y meterte en las cálidas aguas termales de “Les Bains de Ilo” o “Les Bains de Saint Thomas” , al aire libre, rodeado de montañas y a menos cero.
Recomendamos no empezar por la primera si no se quiere renunciar al segundo plan. Después de enfilarnos este tremendo plato de patatas con panceta y reblochón gratinado… tuvimos que dejar el baño para otro día ¡Volveremos!