El emblemático Palau de la Música Catalana, uno de los edifícios modernistas más bonitos de Catalunya y declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, cuenta con una programación interesantísima en la que las familias ocupamos un lugar destacado.
En los primeros meses de vida del bebé, momento en el que los padres aún estamos aprendiendo a cómo pasarlo bien en familia, se agradece contar con ofertas culturales como las del Palau, que ofrece talleres-espectáculos especialmente pensados para el despertar musical de los que acabaron de nacer.
La aventura musical sigue cuando los bebés cumplen 1 año. Nosotros probamos personalmente su taller Zig Zag, Passets al Palau, para bebés de 1 a 2 años. ¡Qué gran satisfacción ver a tantos padres disfrutando de sus bebés… y viceversa!
A las canciones cantadas por la Compañía Kamalundu, les acompaña un piano y una serie de estimulantes objetos y animales.
¡Y por supuesto que no podían faltar las pompas de jabón!
La sesión es interactiva y aunque se centre en el bebé, el protagonismo de los padres salta a la vista cuando nos damos cuenta de que uno de los grandes objetivos de la función es estimular a las familias para hacer música en casa…
…un pequeño pez-sonajero de regalo funciona como recordatorio de la misión.
La oferta sigue con títeres para los niños mayores de 2 años y con variados conciertos familiares aptos para niños a partir de 4, 6, 8-12 años… En fin, imposible no encontrar un concierto adecuado.
La atención con su público se hace notar en las butacas disponibles para dar el pecho, junto a una botella de agua y dos cambiadores… Aparcar el cochecito tampoco es un problema.
Y por si fuera poco, este verdadero “palacio” de la música acaba de añadir a toda esta oferta familiar ya consolidada la posibilidad de introducir a nuestros hijos en la música a una edad aún más temprana. Abans de Néixer al Palau propone un viaje sonoro de 90 minutos en el que la respiración, los latidos del corazón y el propio cuerpo se convierten en instrumentos musicales para fortalecer el vínculo de comunicación entre madre e hijo, al mismo tiempo que estimulan el universo musical del bebé y relajan a la embarazada. Nuestra agente Rapha lo probó (ver crónica Mmmp) y ¡salió encantada!
El día que estuvimos conociendo la actividad para bebés de 1 a 2 años, mi acompañante Teo, de más de 2 años y medio de edad ya se veía un poquito grande para estar allí (qué razón llevan siempre los que determinan la franja de las actividades: hay que hacerles caso) y no parecía tan entusiasmado como los bebés.
Sin embargo, y por primera vez en su vida, antes de ir a dormir esa misma noche nos pidió música en lugar de un cuento. Nos encanta el “momento cuento” (o “historia”, como él prefiere llamarlo), pero verlo cantando y bailando una canción tras otra de forma tan espontánea y placentera nos robó el corazón.
Llenemonos nuestras casas y vidas de música… ¡nunca es tarde ni demasiado pronto para hacerlo!
Más informaciones sobre la programación del Palau pinchando en este enlace.
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Ver Política de Moderación de comentariosLaia
Me doy por aludida eh!! 🙂 Miraré a ver si me van bien los días, suena interesante!
Beles
He estado mirando la web del Palau y los próximos talleres son para bebés de 0 a 12 meses! Por fin una actividad para los superpeques!!! Además la mia es una bailonga, seguro que le encantará.
Gracias por la info!!! 🙂