Marta Gomà i Antònia Llairó son psicólogas y psicoterapeutas formadas en Suiza en psicologia perinatal y hace unos años empezaron en el CAP Roquetes Canteres de Barcelona un programa de prevención emocional en grupos durante el embarazo para contener la depresión y la ansiedad. Con el aprendizaje del programa, y viendo los buenos resultados, decicieron abrir su propia consulta de psicología perinatal Bruc Salut, en el carrer Bruc del centro de Barcelona. Aquí atienden de manera personalizada (presencialmente y ahora también online) a familias que necesitan un soporte emocional en esta etapa.
“En Bruc Salut hacemos un abordaje más intensivo, por ejemplo con madres que están en un embarazo con mucha ansiedad. Aquí hacemos todo el trabajo preparatorio y los primeros meses”, explica Antonia Llairó.
Ser padres es un cambio emocional, con muchas inquietudes y inseguridades y un punto de inflexión en la pareja. Un buen seguimiento emocional durante el embarazo tiene también consecuencias en el desarrollo final de esta etapa. “El estrés se ha comprobado que multiplica por tres la prematuridad. Todas las embarazadas que hemos tratado en grupo que estaban en riesgo de prematuridad han llegado a término. Hay una parte de contención que podemos hacer a nivel psicológico que pensamos que se debería promover más”, añade.
“Cuando hacemos contención, la depresividad baja a la mitad en el postparto y la ansiedad también disminuye significativamente respecto al inicio. Hemos hecho un seguimiento de estos niños y al año y medio tienen mejor lenguaje que los niños que no eran de riesgo y que no han hecho ningún tipo de seguimiento, incluso hay una mejora respecto la población general en el mismo barrio”, explica Marta Gomà.
Pero también atienden casos de duelo perinatal, situaciones de estrés i cambios. La pandemia de la Covid ha dejado huella emocional en muchas familias y ha aumentado las dificultades en la maternidad. “Nos hemos encontrado casos de madres que no salen de casa, con bebés que estaban o hiperestimulados o hipoestimulados; ansiedad, tristeza, conflictos de pareja y mucha soledad, y la soledad es horrorosa. Nos hemos encontrado madres con bebés muy apegados por reacción de miedo, que es normal, pero que después acaba en una situación de estrés; mucho estrés en general”, explica Gomà. “Y mucho problema con la mirada del bebé: las madres están muy pendientes de la situación y toda la problemática y tienen menos miradas hacia el bebé y el bebé hacia la madre. Estamos tan abrumados por tantas cosas que al bebé lo dejamos a parte, y necesita sentir este contacto y esta intensidad”, añade Llairó.
Un espacio tranquilo y familiar
En Bruc Salut han preparado una sala con mucha luz, muy amplia y con varios espacios. Hay un rincón con un tatami y un espejo en la pared para los más bebés; una mesa con sillas pequeñas para los más grandes y unas butacas frente a la ventana para los adultos. En el fondo de la sala: cuentos y juguetes para crear la atmósfera necesaria para que mamás, papás y niños y niñas se sientan cómodos, se conozcan mejor y estrechen sus vínculos.
Atienden dudas y inseguridades, dificultades durante el embarazo como el insomnio, malestar, miedos y pánico al parto; visitas en pareja, talleres para futuros papás, acompañamiento emocional durante procesos de fertilización, …
En la etapa de la infancia y pequeña infancia atienden dificultades de trastorno del sueño, problemas de atención, irritabilidad y cambios de humor, bloqueos en el aprendizaje y en el lenguaje, pero también hacen talleres para tratar aspectos evolutivos como preparar cambios y separaciones (empezar la escuela), dejar el pañal y el chupete, las rabietas, etc.
El primer año de vida de los bebés es el más importante para crear este vinculo familiar y en Bruc Salut os ayudarán si algo interfiere en este precioso proceso.
