Recientemente hemos estado en Tarragona y hemos querido aprovechar la ocasión para volver a uno de nuestros parques temáticos favoritos: PortAventura. Además Indira es bastante fan de Barrio Sésamo y allí se encuentra toda una zona de atracciones infantiles con esta temática, aparte de sus personajes que pasean entre los visitantes.
Aunque fuimos un jueves que no era fiesta en Cataluña, el lugar estaba abarrotado de gente. Nos dijeron que habíamos coincidido con un periodo de vacaciones de alguna parte de Francia y se notó bastante. De todas formas creo que esto está bastante estudiado y que el parque no abre para días en los que no augure un buen aforo, así que hay que hacerse a la idea de que siempre va a estar bastante completito. Os recomiendo, para evitar las colas de la entrada, comprar las entradas por Internet o una vez allí en los cajeros automáticos que hay en el lateral derecho de la entrada.
Una cosa que me encanta del parque, aparte de que tiene atracciones para todas las edades, y alturas pues la entrada en ellas depende de la altura, es la escenografía, los escenarios en cada una de sus áreas y la decoración de temporada. Estuvimos también en Halloween y estaba chulísimo.
En esta visita fuimos directos a Sésamo Aventura, no tuvimos ocasión de visitar a la reina Shambala ni otras atracciones fuertes, esta vez no venía con nosotros la abuela para quedarse un ratito con Indira.
En Sésamo montamos varias veces en La granja de Elmo, donde paseamos en un coche entre vacas, gallinas y los amigos de Elmo con ponchos mexicanos; en el LocoLoco Tiki un autobús volador liderado por el monstruo de la basura, entramos a un gigantesco Árbol Mágico e hicimos un pequeño recorrido a bordo de Coco Piloto. Nos gustó mucho el espectáculo en el que los personajes de Barrio Sésamos cantan y bailan, esta temporada los amigos se iban de viaje en un avión por distintas ciudades del mundo, ¡estos personajes saben lo que nos gusta! El sonido está un poquito fuerte, así que es mejor colocarse más alejado en las últimas filas si no queréis sufrir luego un rato de sordera.
Estuvimos también en la Pequeña China, montamos en algunas atracciones y nuestra peque se lo pasó bomba correteando por los lomos de un gigantesco dragón con toboganes, túneles y distintos niveles a los que subir y bajar.
Decidimos comer en el Lejano Oeste, la cocina no nos emocionó, la verdad, pero a la hora del postre llegaron estos dos tipejos que nos hicieron pasar un rato muy divertido. Y no sé bien lo que hicimos, que en lugar de dejar que nos robasen, Indira acabó con un dólar en la mano.
Otros clásicos que no faltaron en nuestro día en el parque fueron el tiovivo y una versión algo distinta, pero también a caballo: los potrillos, en la que padre e hija galoparon por como auténticos cowboys por un jardín mexicano.
Terminamos el día conociendo en carne y pelo a los 3 monstruos más populares de todo Sésamo: Coco, Triki y Elmo.
Al principio Indira se asustó un poco, pero enseguida se le pasó y ahora conserva una bonita foto que le hace sonreír cada vez que la ve.
